Louisiana..- Primero, fuertes lluvias azotaron el norte de Louisiana. Luego ,fuertes tormentas sacudieron las zonas costeras del sur.
El resultado: inundaciones torrenciales que dañaron miles de casas. Funcionarios se desplazaron a la zona para inspeccionar los daños que dejaron las lluvias.
Mientras el gobernador del estado John Bel Edwards se reunió el pasado domingo con funcionarios y residentes en Merryville, Louisiana, donde los niveles del río estaban a un nivel récord, el alcalde de la ciudad alertó que se prevé más lluvias durante esta semana.
“No hemos salido de la situación de crisis en este momento… Espero que no empeore, pero no hago ninguna promesa”, dijo el alcalde David Eaves, según la afilada de CNN, KPLC.
La oficina de manejo de emergencias hizo eco del mensaje.
“Urgimos a todas las personas a que tengan precaución en áreas donde las inundaciones continúan. La crisis no ha terminado”, dijeron las autoridades en un comunicado el domingo. “El Servicio Nacional del Clima indica que se esperan tormentas eléctricas y un potencial tiempo severo en la noche en el noroeste de Louisiana, que podría causar aún más problemas en ríos y pantanos”, indicó la oficina de manejo de emergencias.
En toda Louisiana, parroquias reportaron que hasta ahora más de 5.000 casas han resultado afectadas por las inundaciones, según las autoridades de emergencia. Y todavía no se ha hecho un balance completo.
En Merryville, en el suroeste del estado, cerca con la frontera con Texas, el alcalde comparó el daño con lo que la ciudad sufrió luego del huracán Rita en 2005. Hasta ahora, las lluvias no han sido tan malas, dijo, pero las consecuencias son cercanas a las de entonces.
“Estamos a un mes largo de conseguir la evaluación del daño hecho. Hasta ahora tenemos 200 casas y 200 trailers debajo del agua”, dijo el alcalde.
En Bossier Parish, la oficina del alguacil publicó un video en Facebook que mostraba un camión tratando de desplazarse a través del agua que llegaba hasta la cintura en una vía en la que los conductores se desplazan normalmente a 88 kilómetros por hora.