Michoacán.- Con la más alta tecnología y capacitados por el Buró Federal de Investigación (FBI), el equipo antisecuestro de Michoacán combate el delito del secuestro con números favorables; no obstante, han tenido bajas durante los operativos.
“Un elemento antisecuestro es un escudo humano, podemos llegar a poner nuestra espalda para que no toquen a la víctima. Durante los operativos tuvimos cinco bajas, tres de ellas en cumplimiento de su deber, dos de ellas elementos de la Policía Ministerial que al rescatar a la víctima recibieron un impacto de bala en la espalda. Las acciones que realizaron fue un acto de heroísmo: por un lado festejas rescatar a una víctima, pero después tenemos que darle la noticia a la viuda de nuestros compañeros”, dijo Rodrigo González Ramírez, titular de la UECS Michoacán.
Menciona que esta unidad es la única en el país que tiene un helicóptero exclusivamente para atender el delito y que están próximos a adquirir drones para el trabajo de inteligencia. “Cuenta con una aeronave otorgada por el gobernador [Silvano Aureoles] para utilizarla específicamente para labores de rescate o investigación; es parte del estado de fuerza de la unidad para reconocimiento de posibles casas de cautiverio, traslado de víctimas, rescates y persecuciones”, comentó.
Mencionó que lo más importante es rescatar con vida a la víctima. Para ello se tuvo que capacitar y mejorar los sueldos del personal. Por ejemplo, un policía ministerial que ganaba 13 mil pesos ahora gana 27 mil.
La UECS consta de dos torres, la primera alberga el área jurídica, agencias del Ministerio Público, salas de juicios orales para prácticas, servicios periciales, área de atención a víctimas, ludoteca, comedor, dormitorios y un auditorio.
La torre dos está destinada al área policial, donde se realizan trabajos de inteligencia e investigación. Cuenta con un dormitorio donde las familias permanecen el tiempo de la negociación y se construye una casa de negociación, que son departamentos para que tengan mejores comodidades los familiares.
Agregó que los mecanismos de presión de los secuestradores son diversos y van desde la amenaza de mutilar a las víctimas y enviar sus partes a los familiares, hasta decirles que si denuncian se pueden enterar y poner en riesgo la vida de la persona. En todo momento las bandas “van a tratar de que no tengan confianza en la autoridad”.
Para que las Unidades Especializadas de Combate al Secuestro (UECS) tengan mejores resultados, se necesita de jueces y magistrados especializados y certificados que nivelen el derecho a la justicia de una víctima de delito, como lo hacen con un detenido que alega violaciones a los derechos humanos o al debido proceso y es liberado, señaló.
Al hacer un balance sobre la efectividad de la unidad que encabeza a partir de su creación en 2014, el subprocurador González Ramírez explicó que en 2013 se registraron 183 secuestros con 197 víctimas, cifra superior a la acumulada a partir del siguiente año hasta la fecha.
En los casi tres años, la UECS atendió 140 casos con 155 víctimas, de las que 112 pudieron ser liberadas. Asimismo, fueron detenidas 387 personas y se desmantelaron 82 bandas.
Subrayan que la defensa de los detenidos ha buscado la forma de obtener su libertad con el argumento de violaciones a los derechos humanos, de ahí su señalamiento de que los jueces sean especializados. “Como parte del nuevo sistema de justicia nos hemos encontrado con unos criterios respetados, pero no aceptados; libertades que se han generado en primera instancia y que hemos ganado en segunda instancia. Hemos tenido criterios que consideramos que están en discrepancia con lo que hay en la carpeta de investigación. Ahora está muy de moda que los abogados utilicen como método de defensa la violación a derechos humanos o del debido proceso, pero a medida en que el Poder Judicial empiece a poner en una balanza y comience a nivelar los derechos de las víctimas, vamos a empezar a tener más sentencias condenatorias”, indicó.
Es necesario que el Poder Judicial tenga el personal especializado, “porque no es lo mismo que hoy juzguen un robo a una tienda y el día de mañana un tema de secuestro; enseñarles que es una red de vínculos para que puedan tener un criterio viable para un rescate pronto, porque muchas veces nos encontramos con trabas en el tema del horario al solicitar una intervención de telecomunicaciones”.