Una ataque talibán suicida con bomba en la base militar estadounidense de Bagram, en Afganistán, dejó dos soldados y dos contratistas estadounidenses muertos.
El secretario de Defensa Ash Carter indicó otros 16 soldados de EEUU y uno de Polonia resultaron heridos a consecuencia del ataque. Bagram está considerada como la base militar más fortificada del país.
«Una kamikaze mató a dos soldados estadounidenses y a dos contratistas estadounidenses» en la base aérea de Bagram, en «un aparente ataque suicida con bomba» realizado a primeras horas de la mañana, según explicó Carter en un comunicado.
El grupo del talibán reivindicó el atentado a través de un mensaje de su portavoz Zabihullah Mujahid en Twitter en el que afirmó que un «mártir» consiguió golpear la base tras cuatro meses de preparación y generar «grandes bajas» a las fuerzas estadounidenses.
17 heridos
Según la información aportada hasta ahora, la deflagración causó heridas a 16 soldados estadounidenses y uno de nacionalidad polaca que participa en la misión de la OTAN en el país.
El secretario de Defensa se dirigió a los responsables y les prometió que «no pararemos en nuestra misión de proteger nuestra patria y de ayudar a Afganistán para que pueda asegurar su propio futuro».
El secretario de Defensa afirmó estar «profundamente triste» por lo ocurrido y presentó sus «sinceras condolencias» a las familias de las víctimas.
Este ataque se ha convertido en el más violento contra la OTAN en el país durante este año. La organización tiene cerca de 12,000 personas sobre el terreno prestando ayuda y entrenamiento a las fuerzas de Afganistán.
Obama se había comprometido a reducir el número de efectivos en el país para que a final de año hubiera solo 5,200. En la actualidad hay 9,800 soldados y se prevé que hay 8,400 hasta 2017.
