Charlotte, NC.- Reinaldo Barrera, un inmigrante cubano que encontró su camino en el arte del tatuaje en la ciudad de Charlotte.
Su sueño lo llevó desde Cuba a Ecuador, donde trabajó en programas de televisión, hasta llegar a Estados Unidos. La perseverancia y la pasión son las claves para el éxito, según Barrera, quien se reinventó como tatuador y encontró en esta forma de arte una manera de conectarse con las personas.
Para él, la herencia hispana significa continuar el legado de aquellos que vinieron antes y allanaron el camino para la comunidad latina en Charlotte.
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Progreso Hispano News entrevistó con Reinaldo Barrera quien contó su historia desde que salió de su Cuba natal para alcanzar sus sueños.
¿Qué te motivo a salir de Cuba?
Yo siempre tengo una frase que dice que uno puede vivir en esta vida sin comida, sin dinero, pero no sin sueños. Yo salgo de Cuba tras un sueño, en busca de crecer un poquito más como artista, y como ser humano.
La formación
Mi pasión era hacer televisión. Estudié en el Instituto Superior del Arte en Cuba para director, que aquí se conoce como productor, de radio cine y televisión.
Hacías programas en Cuba, pero encontrarte un techo.
La dictadura cubana es muy reacia y todo lo que suena a capitalismo o a otra idea que no es la concebida por ellos, pues te vetan y es lo que me pasaba. Yo quería hacer otro tipo de programas de entrevistas, reality show. Siempre me decían que yo tenía una mentalidad capitalista. Entonces, se me dio la oportunidad de ir a trabajar a Ecuador en un reality show.
¿Soñabas con venir a Estados Unidos?
Siempre fue mi sueño, yo nunca lo niego. Cuando me hice ciudadano americano fue el día más feliz de mi vida porque es el sueño más grande que he podido lograr. Siempre quise vivir en un país de libertad.
Los sueños y la reinvención
Yo digo que los sueños no se pueden olvidar, se dejan guardados en un lado, pero siempre en un lugar donde tú lo puedas ver. Y siempre que lo veas decir: “voy echarle ganas”. Te va a tocar trabajar en otras cosas, te va a tocar hacer otro tipo de cosas, pero siempre teniendo la meta clara de lo que quieres hacer, de lo que quieres lograr. El triunfo o el éxito en esta vida se debe a dos cosas: talento y perseverancia.
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Sigues en el mundo de las artes, pero en el tatauje.
El tatuaje llegó a mi vida porque muchos amigos me lo sugerían, yo había tatuado en Cuba cuando era estudiante. Luego de trabajar en canales de televisión creé mi propia compañía de streaming y empecé a trabajar con muchos artistas, pero es una labor agotadora, cuando trabajas con muchos artistas siempre estás de gira (…) Tenía que buscar un negocio que me apasionara, pero que me diera el dinero que me daban los viajes. Ahora tengo la posibilidad de dormir en mi casa junto a mi esposa todas las noches.
La magia del tatuaje
El tatuaje tiene una magia muy bonita, conoces a muchas personas y su identidad. Uno se vuelve un poco terapeuta. Es increíble como el tatuaje es identidad también.
¿Cuál es la mejor huella que los hispanos pueden dejar en Estados Unidos?
Nosotros agarramos un camino hecho porque los que vinieron antes, sobre todo a la ciudad de Charlotte en la que solamente se hablaba inglés, hicieron un buen trabajo. La comunidad latina actualmente está bien valorada porque esas personas se dedicaron a hacer ese buen trabajo por nosotros y nos toca ahora continuar ese legado.
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