Monroe, NC.- Johnny Johnson, un hombre de 30 años residente en Matthews, protagonizó una escena insólita el martes 14 de octubre por la tarde en el Palacio de Justicia del Union County. Acudió al lugar para una comparecencia judicial relacionada con un delito previo, pero terminó sumando nuevos cargos por una cadena de decisiones que dejaron perplejos a los agentes de seguridad.
Johnson llegó al juzgado con una mochila y, antes de ingresar, pidió a los agentes que la guardaran mientras atendía sus asuntos legales. Los oficiales le informaron que la política del tribunal prohíbe almacenar pertenencias personales, por lo que le sugirieron dejarla en su vehículo o regresarla a su hogar.
Lee también: ¡Insólito! Vendió la cortadora de su abuela, fingió un robo y terminó preso
El hombre, aparentemente frustrado por la respuesta, salió del edificio y lanzó la mochila entre los arbustos cercanos. Acto seguido, regresó al interior para continuar con su audiencia, sin sospechar que su intento de “resolver rápido” terminaría exponiéndolo aún más.
Poco después, los agentes lo arrestaron por órdenes pendientes relacionadas con la violación de una orden de protección por violencia doméstica. Sin embargo, la historia no terminó allí. Los oficiales, intrigados por el misterioso bulto abandonado fuera del juzgado, realizaron una inspección que reveló un hallazgo alarmante: 26 gramos de metanfetamina, diversos utensilios asociados al consumo de drogas, un machete y un hacha.
La mochila, la misma que minutos antes Johnson había ofrecido a los agentes para resguardar, se transformó en la principal evidencia de su nuevo caso. Ahora enfrenta cargos adicionales por posesión de metanfetamina, tenencia de parafernalia de drogas, posesión de armas en propiedad estatal y portación de un arma oculta. Permanece bajo custodia con una fianza establecida en 25.000 dólares.
Lee también: Arrestan a hombre por fiesta ilegal en casa donde trabajaba de jardinero
El irónico desenlace dejó una lección clara para los presentes: En el Palacio de Justicia, los agentes están dispuestos a servir y proteger, pero no a guardar mochilas con contenido ilícito. La bolsa de Johnson finalmente quedó “resguardada”, aunque no de la manera que él había imaginado.
Las autoridades de Union County destacaron el trabajo coordinado de los agentes y recordaron a la comunidad que la vigilancia en los edificios judiciales sigue siendo estricta. Una decisión equivocada puede convertir un trámite de rutina en un problema mucho más grande.