Mooresville, NC.- Un incendio de gran magnitud destruyó una vivienda ubicada a orillas del Lake Norman a las a las 4:47 a. m. el viernes 19 de diciembre, en un hecho que se convirtió en el segundo siniestro de gran escala registrado recientemente en la zona según reportes. El incidente ocurrió a pocos días de la Navidad y generó un importante despliegue de recursos de emergencia debido a las complejas condiciones para combatir el fuego.
Alrededor de las 4:47 de la mañana, los servicios de emergencia recibieron el aviso de un incendio en un garaje situado en el 120 Kyle Lane, cerca de Stumpy Creek Park. El equipo de Troutman Engine 2 llegó primero al lugar y confirmó que el fuego comprometía por completo la estructura. Las llamas avanzaban con rapidez y representaban un alto riesgo para la vivienda principal.
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Los bomberos iniciaron las maniobras de respuesta colocando mangueras de gran diámetro (LDH). Sin embargo, la zona carece de bocas de agua cercanas, lo que complicó de inmediato las labores de extinción. Ante el suministro limitado, el comando del operativo solicitó apoyo adicional, incluyendo el bote de bomberos 13 del Departamento de Denver y un equipo de tareas de cisterna proveniente de los sectores South End y Central del condado Iredell.
La respuesta interinstitucional permitió la llegada de camiones cisterna pertenecientes a los departamentos de bomberos voluntarios de Statesville y Mooresville. Estos recursos resultaron clave para establecer un sistema alternativo de abastecimiento de agua y sostener el combate contra el incendio. A su arribo, el bote de bomberos 13 desplegó su arma de diluvio y comenzó a atacar las llamas directamente desde el lago, una maniobra decisiva dadas las condiciones del terreno.
Mientras se organizaba completamente el operativo especial, los equipos en tierra agotaron el agua de sus tanques. Esta situación obligó a los bomberos a adoptar una estrategia defensiva temporal y a vigilar el avance del fuego mientras la vivienda continuaba ardiendo. Posteriormente, la instalación de tanques portátiles permitió reanudar el suministro constante de agua hacia los vehículos de extinción.
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Las autoridades informaron que el incidente continúa activo y que las tareas de control y evaluación de daños siguen en curso. Hasta el momento no se difundieron reportes sobre personas lesionadas, aunque la vivienda sufrió daños totales.
Las fuerzas de emergencia solicitaron a los automovilistas extremar la precaución al circular por la zona y ceder el paso a los equipos de primera respuesta. El siniestro, ocurrido en plena temporada festiva, vuelve a poner en foco los desafíos que enfrentan los cuerpos de bomberos en áreas con acceso limitado a infraestructura hídrica y refuerza la importancia de la cooperación regional ante emergencias de gran escala.