Para nadie del pueblo estadounidense le escaparía la duda de lo que sucedió con el ex-presidente norteamericano Donald J.Trump, el martes 3 de abril 2023, cuando en el piso # 15 del edificio de la Corte de Justicia de Manhattan, Nueva York, llegó el ex-mandatario Trump, custodiado de oficiales de policía para entregarse a la justicia ordinaria y responder por 34 cargos que la Fiscalía de ese Estado lo ha acusado y, que su inocencia se presume hasta que se pruebe lo contrario, pero teniendo que defenderse a capa y espada del fiscal acusador.
En estos 34 cargos que presenta la fiscalía de Nueva York, contra el ex-presidente imputado, los más preocupantes para el encausado serán los de falsificación de documentos para favorecer a sus empresas y que obviamente se tipifica como delito grave; es decir, que podría ser reducido a prisión, cuya potestad no es del Fiscal sino del Juez de la causa, que también tiene que conocer de los miles de documentos clasificados que se llevó a su mansión de Mar-A-Lago.
Incitación de sublevación
El segundo cargo muy grave, que de comprobarse, no tendría ninguna posibilidad de inocencia Donald Trump, por la incitación de sublevación con sus seguidores el 6 de enero 2020, tomándose el Capitolio en Washington,DC., hecho inédito que fue repudiado por el mundo entero, que también podría ser condenado. Y por último, otro cargo imputado, muy grave, que la Fiscalía asegura tener pruebas suficientes y que el encausado podría ser condenado, es aquel que mediante pedido a un alto funcionario electoral del Estado de Georgia, sea favorecido con las eleciones pasadas frente al actual presidente Joe Biden.
Estos son los 3 cargos más delicados que la defensa del ex-presidente Trump difícilmente pueda desvanecerlos ante la Fiscalía de Nueva York, porque son de dominio público y esa etapa probatoria, la Fiscalía tiene muchas ventajas a su favor; no así, la acusación o imputación que le hace la actriz porno, porque esos cargos fueron por falsificación de registros de pagos para silenciarla y a ésta no le interesa que Trump vaya a la cárcel; pero sí por los otros delitos que se lo acusa.Y esta pretensión no es la última palabra de los acusadores sino del Juez que aboca conocimiento del juicio y dictamina o sentencia en mérito a las pruebas procesales.
Primera vez en la historia estadounidense
En materia política mundial, es evidente que el caso Trump no sea el único y, no porque los escándalos han cruzado fronteras sociales y políticas con importantes personajes presidenciales de Europa, Africa, Asia y Latinoamérica, sino porque hay que considerar que este es el primer enjuiciamiento político en la historia de los EE.UU. que se le hace a un ex-presidente de esta nación, que de comprobarse uno o más de los 34 cargos por los que se le acusa, a él le asiste el recurso de apelar y de fracasar en su intento por mantener su inocencia, su prisión lo convertiría aún más, como un mártir político que le aumentaría más su popularidad, aunque actualmente, hay encuestas de News Poll de ABC, que el 50% expresan que SI, debe ser acusado; con un NO, el 30% y no saber, con un 17%( hasta el 8 de abril 2023).
Lo curioso, es que el ciudadano sencillo, de a pié o corriente, por decir lo menos, se hace siempre la misma pregunta: por qué a estos altos funcionarios cuando cometen un delito, están adornados con altos privilegios?.Y si es que ciudadanos sencillos o a pié infringieran en delitos de los que se acusa en esta ocasión al ex-presidente Trump o a otros de “cuello blanco”,con seguridad, van a prisión inmediatamente, sin lugar a dudarlo!!.
No se respeta los resultados electorales
La democracia participativa se encuentra en crisis, pero en sí no la democracia misma, porque lo nuevo en cierta gente es que no está dispuesta a aceptar la derrota; es decir, son aquellos partidos con sus políticos que guardan una desconfianza generalizada y no respeta los resultados en el sistema electoral.
Eso es lo que existe con aquellos políticos cuya narrativa es desconfiar de los procesos electorales que ya a sabiendas tenían vaticinada su derrota, porque iban a perder.Lo cierto es que, así como va la política, hasta podríamos tener un presidente estadounidense con orden de prisión, como libertario, sin declarar sus impuestos, dando crédito al racismo, discriminando y apodando a personas con los calificativos más vergonzosos de un mandatario, donde la institucionalidad de esta nación es la base democrática de este gran país por el que fue fundado.