Tegucigalpa – Hondura.- El gobierno de Estados Unidos continúa marcando presión en Centroamérica para lograr evitar que miles de migrantes lleguen a suelo estadounidense. La pasada semana se conoció que el gobierno de Trump intenta convencer a Honduras y El Salvador que acepten la opción de convertirse en «tercer país seguro», tal y como ocurrió en Guatemala, que el 26 de julio firmó el acuerdo.
Sin embargo y pese a que la información de negociación entre ambos países y Estados Unidos, fue expuesta por el secretario interino de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kevin McAleenan, Honduras asegura que no ha recibido ninguna propuesta para convertirse en refugio migratorio.
«Oficialmente, no hemos recibido ninguna propuesta de Estados Unidos sobre tercer país seguro», manifestó el canciller de la nación centroamericana, Lisandro Rosales, durante una encuentro de trabajo con la líder demócrata en la cámara baja del Congreso, Nancy Pelosi, a la cabeza de una delegación de ambos partidos, Republicano y Demócrata.
Los representantes del gobierno de Honduras no han desestimado la posibilidad de aceptar la propuesta de EE.UU. si esta llegará formalmente.
«Si lo recibimos, lo analizaremos, lo analizaremos y tomaremos decisiones», añadió Rosales.
Las autoridades de Honduras durante la reunión de trabajo también abordaron el tema del recorte de presupuesto a su país que ha propuesto el presidente Donald Trump, como castigo a los países centroamericanos por no lograr frenar la migración. En el encuentro también participó el subsecretario de Seguridad, Luis Suazo.
«La delegación es bipartidista y eso nos da a entender que no debemos temer, ellos vienen a ver cual sería el impacto real que puede tener este recorte de presupuesto y si incidiría en que más hondureños salgan del país», aseguró Suazo.
