Culiacán – México.- Con el objetivo de darle seguimiento al tiroteo registrado en Culiacán tras la detención de Ovidio Guzmán López, alias “El Ratón” e hijo del narcotraficante “El Chapo” Guzmán, los integrantes del gabinete de seguridad del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, e incluso el propio presidente, se reunieron.
Tras analizar lo sucedido, el mandatario manifestó haber apoyado la decisión de liberar a Guzmán López, pues la estrategia de su Gobierno “no se trata de masacres”, muy por el contrario que la anterior administración que a su juicio “convirtió el país en un cementerio”.
“La decisión la tomó el gabinete de seguridad de manera conjunta, los secretarios de Defensa, Marina y Seguridad Pública. Yo respaldé esta postura por considerar que lo más importante es la protección de las personas, lo más importante es que no haya muertos, es la paz. (…) No tenemos dudas acerca de que fue la mejor decisión, el poder no es prepotencia, no es violencia, es humildad (…) Se decidió proteger la vida de las personas”, manifestó López Obrador.
De igual forma las autoridades de seguridad, detallaron que el hijo menor del narcotraficante mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán, había sido arrestado tras un operativo federal en Culiacán, durante el operativo se registraron los primeros enfrentamientos pues los miembros del Cártel de Sinaloa mostraron resistencia a la autoridad.
Durante la operación realizada en la vivienda en la que fue localizado Guzmán López, “hubo 9 muertos y 23 heridos”, precisó el ministro de seguridad, Alfonso Durazo.
Tras la captura de Ovidio Guzmán López se desencadenó una batalla en Culiacán, miembros del Cártel se enfrentaron a los agentes de seguridad, mostrando incluso más fuerza que las autoridades, dicha situación originó la liberación casi inmediata de “El Ratón”.
La cifra de muertos y heridos producto de los ataques del Cártel de Sinaloa luego de la detención y antes de la liberación, aún no se ha precisado, sin embargo el secretario de Seguridad Pública de ese estado, Cristóbal Castañeda, informó de forma “preliminar” que 21 personas habían sido heridas por arma de fuego y que muchos militares y miembros de la Guardia Nacional habían muerto, además de “dos o tres civiles”.
