Miami – EEUU.- En dos semanas, los condados de Broward y Palm Beach, en el estado de Florida, empezarán a recibir a miles de migrantes indocumentados, que llegaron a Estados Unidos, a través de la frontera sur.
La decisión, tomada por el gobierno federal, fue comunicada, este viernes, a las autoridades locales.
En Broward, el alcalde Mark Bogen confirmó que el Shriff del condado fue informado por la Oficina de Aduanas y Control Fronterizo (CBP, por sus siglas en inglés). En el caso de Palm Beach, fue la Patrulla Fronteriza la que realizó la notificación.
El plan, concebido para evitar el colapso de los refugios migratorios que se encuentran en Texas y en otras regiones que limitan con México, implica establecer puentes aéreos para el traslado semanal de unos 270 migrantes. Eso quiere decir que serán más de mil personas al mes.
En Florida, líderes y gobernantes locales han cuestionado la medida. Aseguran que los condados escogidos para la recepción de los indocumentados no cuentan con refugios designados ni con fondos para alojarlos, alimentarlos o mantenerlos seguros.
Las autoridades tampoco saben si se trata de niños, adultos o de familias completas. De manera adicional, dicen desconocer si se les proporcionará o no el récord criminal que pueda tener alguno de los inmigrantes.
