Houston – EEUU.- El cuerpo sin vida de un bebé de diez meses fue hallado a orillas del Río Bravo, afluente que demarca el límite entre Estados Unidos y México.
El pequeño era parte de una familia que fue arrastrada por la fuerza de la corriente, cuando intentaba cruzar la frontera haciendo uso de una balsa.
La Patrulla Fronteriza ubicó el cadáver, gracias a un operativo que se activó cuando un sujeto confesó que era parte de un grupo de nueve migrantes, que intentaba ingresar a suelo estadounidense, empleando una embarcación improvisada.
“El hombre también informó a los agentes que su esposa, dos hijos, de diez meses y seis años, y un sobrino, de siete, estaban entre los que fueron arrastrados”, indicó el Servicio de Protección Fronteriza.
La operación también permitió rescatar a la mujer y al pequeño de seis años, así como a otro hombre que estaba en compañía de su hijo.
Los trabajos de búsqueda y salvamento aún continúan activos, pues las autoridades no han dado con el paradero de otros dos menores y de un adulto.
