Washington – Estados Unidos.- La tercera autoridad de Estados Unidos, por su cargo como presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, anunció que se han iniciado la investigación y proceso de “impeachment” contra el presidente estadounidense, Donald Trump.
Pelosi, quien recordó que durante más de dos años Trump ha protagonizado varios escándalos, encabezando la lista la trama rusa, explicó que la gota que derramó el vaso para así dar inicio a un juicio político en contra del mandatario, que podría conllevar a su destitución, ha sido la presunta presión de Donald Trump a Ucrania para perjudicar la candidatura electoral del demócrata Joe Biden.
El “impeachment”que se abre a Donald Trump, sería el cuarto proceso similar que el congreso de Estados Unidos pone en marcha a lo largo de su historia. Específicamente y con relación a presidentes, solo dos se han enfrentado a su posible destitución al ser llevados a juicio, Bill Clinton y Andrew Johnson.
“Las acciones llevadas a cabo por el presidente suponen una violación grave de la Constitución, traicionó su juramento al cargo. El presidente debe rendir cuentas”,dijo Pelosi desde el Capitolio.
Arrancar el “impeachment” contra Trump, fue motivo de debate para los demócratas en la Cámara de Representantes, algunos, incluida la propia Pelosi, mostraron recelo, mientras que otros lo reclamaban.
El presidente Donald Trump reaccionó casi de inmediato al anuncio realizado por la demócrata, el primer mandatario acusó a sus oponentes de estar ejerciendo una especie de “caza de brujas” en su contra.
“Un día tan importante en Naciones Unidas, tanto trabajo, tal éxito, y los demócratas lo han estropeado a propósito y lo han menospreciado con más breaking news de la basura de la caza de brujas. ¡Es muy malo para nuestro país!”, escribió Trump en Twitter.
Pese a que la apertura del juicio político contra Trump, no necesariamente implica que en el Senado lo acusen y voten por su destitución, el proceso sí marcará su tiempo en la presidencia en lo que resta de período y lleva la campaña electoral de 2020 a una nueva fase.
La Constitución estadounidense establece que el presidente «debe ser destituido de su cargo si es acusado de y condenado por traición, soborno, u otros crímenes o delitos graves».
