Madrid – España.- Lorenzo aplacó su furia. Después de un fin de semana en el que exhibió una peligrosa categoría 5, el fenómeno se degradó a tal punto que, este lunes, se le clasificó como un huracán de categoría 2, en la escala Saffir-Simpson.
A pesar de su condición actual, Lorenzo sigue teniendo potencia. Sus vientos máximos sostenidos alcanzan los 175 km/h, según lo reportado por el Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés), con sede en Estados Unidos.
La tormenta se localiza a poco menos de dos mil kilómetros de las Azores, un conjunto de islas paradisíacas, que pertenecen al territorio de Portugal. De acuerdo con las previsiones, el vórtice estará muy cerca de ellas, hacia la madrugada del miércoles.
Aunque no golpeará a la Región Autónoma de forma directa, Lorenzo, junto a sus ráfagas de viento y sus lluvias intensas, podría ocasionar inundaciones potencialmente mortales.
Las autoridades han advertido sobre esa posibilidad a los habitantes de las Azores, sobre todo a los que residen en la parte más occidental de las islas.
